13 marzo 2012

Josu, Elsa y Francisco

Cuando murió Aurora, una semana después regresé a la facultad. Y la primera clase que tenía era "práctica docente dirigida" con Francisco Palencia. Entonces llegué y sin poderme contener les dije. Sin lágrimas, porque mucho tiempo me costó poder llorar. Sólo les conté aquello. Entonces Francisco Palencia se levantó del escritorio y me abrazó.

No recuerdo cómo fue que le conté a Josu Landa, pero ha de haber sido en condiciones similares. Y recuerdo cómo les conté el trajín que fue que aquello hubiera ocurrido en Guatemala. Y Josu nos contó cómo el consulado mexicano los hizo batallar mucho a él y a su hija cuando murió su esposa. Y toda la clase estuvieron él y mis compañeros conmigo, hablando y escuchándome.

Lo que sí no puedo recordar fue cómo le dije, e incluso si le dije a Elsa Cross. Sólo recuerdo que finalmente dejé de ir a todas mis clases. Y al final, cuando recobré el sentido de la realidad, regresé a buscarla para preguntarle qué iba a pedir para el extraordinario, pues no me había presentado al final. Y ella me dijo que me había puesto ocho, que había participado mucho en clase y que el primer trabajo que había entregado había sido bueno.

Hoy me encontré a Elsa. Al principio ella no me reconoció. Al final, después de que leí un pequeño texto, se acercó y me dijo, "es que no te reconocí, hasta que oí tu voz". Y me sorprendió mucho saber que no se había olvidado ella de mi, después de tantísimos años.

De que Josu y Elsa son poetas reconocidos me enteré mucho después de haber tomado clase con ellos. Yo sólo sabía que sus clases eran un placer. Con Josu conocí a Lévinás: resulta que él jamás lo había leído y decidió enseñarnos a acometer un texto nuevo. Es evidente que el objetivo se cumplió a la perfección porque yo iba a hacer mi tesis de Lévinas, y si terminé haciéndola de Agustín fue justamente por aquél 'yo' tan parecido entre el Africano y el Lituano. Así que haberlo conocido como filósofo y después saberlo poeta, como dos cosas que no se implican ni se estorban, fue una gran sorpresa para mi. Con Elsa tomé un gran seminario sobre mitología comparada. Mi vocación por la historia mucho le debe a aprender a entender estructuras complejas de pensamiento como tales, más allá de si son "acertadas" en sentido científico o no. Con ella conocí el mito de Lilith, la historia de Lucrecia, y aprendí a investigar.

Y ¿Francisco Palencia? Él es el único que no está aquí. Él se dedicaba a las cuestiones de la educación y por ello mismo le parecía un fraude aquella materia que daba: "práctica docente dirigida". Así que nos hacía leer poesía y aquellas clases eran un gozo total. Y, pues, había cierta sabiduría honda en sus clases. Fue entonces cuando escuché aquella frase que nos dijo: los bienes culturales son los únicos que crecen cuando se comparten.

Hoy, mientras leía a Arquíloco y leía el gusto con que se alegraba que su amigo no se hubiera ahogado en el proceloso mar, lo recordé hondamente. Fue el Pacífico quién se llevó lejos a Aurora. Y henchidos de dolor los pulmones me tardé mucho en liberar por los ojos la presión de su ausencia. Y de pronto vino a mi mente la frase de Francisco Palencia, y el abrazo aquél en el momento más necesario de todos...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Esponjita: tal vez puedas ayudarme, sabes qué significa en el slang de tu profesión escribir aristotélicamente?

Jimena

Esponjita dijo...

Santo cielo... ¿me podrías da un poquitín más de contexto? Es que se me vienen muchas cosas a la mente, pero no sé a qué se refieran quienes lo dijeron.

Pues Aristóteles, a diferencia de Platón no era en absoluto "literario", y difícilmente se permitía una frase que no tuviera estrictamente que ver con la demostración que hacía, es decir, no era irónico, ni simpático ni nada. Algo así como un señor Spock. (eso sí: el único que no se equivocaba era él).

Ahorita es lo que me viene a la cabeza, pero sospecho que no es eso a lo que se referían. ¿Sí podrías darme un poquitín más de contexto?

Anónimo dijo...

Ay esponjita! gracias por responder tan rápido. Pues el contexto es la forma de mi escritura: simple y sencillamente. y creo que va por ahi quienes dijeron eso sobre mi, Schade:(
pues gracias otra vez por tomarte el tiempo para sacarme de esta duda.
Jimena

Esponjita dijo...

¡ay! pero no se entristezca... pues es que puede significar otras cosas:

Que es clara, que es muy argumentada, y, sobre todo, que puede ser demoledora... (lo que pasa es que se supone que así deberían ser todos los filósofos... por ejemplo: Platón es todo menos claro :s)

No se achicopale. Y mire, si quiere alegrarse un poco con tal comparación, échele un ojo a la Etica Nicomaquea, creo que al libro X en particular, donde se habla de la amistad. No será muy retórico Aristóteles, pero es un libro que hasta lagrimitas le saca a uno...

Un abrazo y cualquier cosa que se le ofrezca, pos con todo gusto!

Esponjita dijo...

Digamos que Aristóteles, sin ningún ornamento, es capaz de decir cosas muy bellas. Ahí en la poética dice, al comparar la 'tragedia' con la historia, que la historia es verdadera pues cuenta los hechos como fueron, pero la poesía es universal porque dice cómo debieron haber sido las cosas.

:)

Anónimo dijo...

Sí, verdad? pero bueno, un poquito modo más literario no me haría daño;) De todos modos, muchas gracias esponjita por tus comentarios alentadores:)
otro abrazo!
Jimena