06 septiembre 2013

AVE FÉNIX (versión tallereada y desrococozizada)

Esta es una versión surgida de una tallereada. Agradezco mucho los comentarios de mis tallereadores (que me hicieron recodar... cof, cof, cof, cof... mucho a mi asesor... cof, cof, cof, cof... incluyendo el tonito sarcástico pero buenaondita... cof, cof, cof... pero que espero hayan surtido el defecto deseado... por mi...). 

***


AVE FÉNIX

Debe ser todo un espectáculo mirarme enamorada.

No sólo se ve a través de mis ojos:
toda yo soy una pecera traslúcida.
Basta que te acerques,
roces sin querer mi mano, y helo ahí:
minúsculos pececitos en llamas,
vórtices ígneos, reacciones en cadena
vaporizando la estructura básica de mi pose.

Y tú
–que eres puros ojos–
conoces bien mi maquinaria:
jalas la palanca ésa, das con el botón aquél,
y abres la claraboya de mi sonrisa idiota.

(Te solazas, divinidad,
de ser causa de las llamas que contemplas).

Ando luego con cuidado de no acercarme mucho.
Un instinto me hace rebotar sobre tu presencia
y me mantiene lejos, porque adivina la combustión
y el resultante remolino de ceniza y hollín
que tiznará tu pulcra camisa negra.


¡Pero quiero ser remolino!

2 comentarios:

Alfonso dijo...

Muy bueno, todo un poema esponjoso. Me gustaría expresar así mis sentimientos, a veces, pero se me dificulta mucho.

Esponjita dijo...

Alfonso:
Muchas gracias.
Yo a veces lo que quisiera es poder expresarme de una manera más efectiva...
Abrazo.