El famoso anónimo (quién puede haber más famoso: escribió grandes obras, los mejores corridos rancheros mexicanos, y es autor de blanca nieves y la caperucita roja), sí, el famosisímo anónimo, declaró que este blog es tan ñoño como Martin... el de los Simpson.
Y después de reflexionarlo un rato, me dí cuenta de que, efectivamente, soy parte del club de los ñoños Martinoides, y que eso es bueno.
Esto me recuerda aquella vez que un compañerito de la primaria me gritó ¡¡Hippie! para insultarme. Yo le aclaré que, por supuesto, Hippie no podía ser un insulto, puesto que ellos eran los buenos de la historia (nótese que mis papás eran estudiantes de la facultad de ciencias y su papá de la de derecho). La discusión, desde ese momento hasta el recreo, versó sobre si aquello era o no ofensivo.
Y así pasa ahora con lo de Martin el ñoño... ¿debía ofenderme por tal apelativo? ¿supe acaso que era una ofensa sólo porque aquello iba acompañado de "asco" y "guácala"? No lo sé. Lo que sí sé, es que es posible hacer un bonito encomio a Martin, y explicar por qué no me molesta parecérmele en lo absoluto.
1.- Es gordito y panzón
2.- Está siempre metido en su rollo. La baja capacidad intelectual y los vanos y absurdos gustos de sus compañeros inmaduros no le incomodan en lo más mínimo. Él simplemente está al margen.
3.- A sus diez años es mucho más maduro que Homero.
4- Tiene afición por el Renacimiento (como es un personaje gringo, supondremos que le gusta Shakespeare)
5- Entiende y, sobre todo, disfruta la poesía
6.- Le gusta tocar el Laud
7.- Lo más importante: LE IMPORTA UN PITO LO QUE LOS DEMÁS PIENSEN DE ÉL
Como pueden ver, Martin es un personaje mucho más feliz que otros habitantes de Springfild: una biblioteca le da profunda felicidad, y de grande será un erudito en renacimiento Florentino (un erudito que sí haya leído a Plotino y que sí sepa Latín).
Ustedes podrían preguntarme porqué el elogio va para Martin y no para Lisa, la heroína intelectual por excelencia. Y les contestaré:
Lisa tiene todas esas cualidades, pero segurametne de grande, a ella jamás se le ocurriría estudiar filosofía, y ello por una buena razón:
Para ella, la Justicia es el valor más importante de todos. Es, digamos, una pequeña Mafalda. Sin embargo, Martin es un hedonista epicureísta cualquiera:
Para él, si es bello, basta. El sería un filósofo muy feliz. Lisa tendría que estudiar algo últil para la Humanidad, algo así como economía, sociología o incluso sería el mejor promedio del CELA. Pero todos sabemos, después de que le echó a perder su cerdo a Homero, que ella cerraría la Facultad. Martin simplemente vería con indiferencia que le cerraron la escuela, y se metería al Perseus Project para seguir traduciendo los Elementos de Teología de Proclo
la esponja hedónica.
PD 1: A veces extraño a Lisa, pero es saludable, por un rato, dejar de pensar en lo políticamente correcto.
PD 2: Quien nos conoce, sabe perfectamente que yo son Lisa y soy novia de Martin... ¿por eso lo defenderé tanto?
16 comentarios:
Pequeña diferencia de opinión respecto al punto 7, el del pito:
En el capítulo (súper fan simpson, oh sí!) en donde Lisa se hace famosa por la construcción de una alberca en su casa, Martin tiene celos y pide que le construyan otra igual. Cuando la tiene, dice algo como "Ahora yo seré la reina de la primavera, [y al notar a los trabajadores que han escuchado]... rey, rey, quise decir rey", lo cual para mí revela un declarado interés por la aceptación social.
Por otro lado, a Lisa, a quien definitivamente importa la aceptación social, no creo que le agradaría la idea de andar con Martin. Chale!
Saludos desde la de los ángeles.
Anónimo: Bueno, mi querido anónimo, por lo menos he logrado algo ¡has leído un post completo!
Leo Ávila: tienes toda la razón, olvidé ese capítulo. En realidad cuando escribí pensaba en los capítulos donde a Bart le ponen lentes y zapatos ortopédicos, y es aceptado en el círculo de ñoños.
Pero tienes toda la razón. De todos modos, me gusta también la imagen de Martin enjaulado planchando y cantando cuando despien a Skinner...
Lo de que Lisa en novia de Martin, no es una suposición: te tengo que presentar a mi Martin personal, quien, dicho sea de paso, cae seguido en esos ataques de soberbia que analizaste con el capítulo de la alberca.
Y, mi querido anónimo: fíjate en algo... la humanidad podrá saber que estuviste aquí, pero sólo mediante mi versión de tí, desfigurada y hecha a mi placer... tú, jajaja, el original y el auténico, estarás siempre bajo mi poder... mua ja ja ja
Ves porqué la quiero, condenadota??? especialmente por aquello de que no te importa lo que los demàs piensen...
Larga vida a los anónimos que caen bajo el poder de la Esponja: son sòlo un dispositivo para sus ìnfulas de poder y juego, dicho en otros tèrminos: son sus juguetes favoritos.
Besos niña!
Creo que Martin, en efecto, busca la aceptación, al igual que Lisa... Pero eso tampoco la convierte a usted en Lisa... Creo que allí le encuentro a usted más parecidos con Martin. Usted es un Martin envidiando la alberca de Lisa (oops. fuerte afirmación). No me censure. no soy anónimo...
No lo censuraré mi querido fru fru... jejeje. No, mire:
En ese sentido usted tiene razón: quiero la alberca, quiero ser reina de la primavera, y en esas ando justamente.
Pero yo me refería más bien a mi actitud cegeachera: en ese sentido me siento a veces lisa. y decía que usté ya sabe quién es Martin porque, aunque no lo acepte, es más epicureísta que tú... jejeje.
Bueno, pos aquí sigo, que son las ocho cuarentaytrés de la mañana del sábado, y yo no dormí escribiendo mamadas sobre Agustín... pero al fín sobre Agustín, jejeje, a ver qué tal sale el jueguito.
la desveladísima esponja
Patética: es el pathos amante de la bella Sofía.
Ñoña: Soy maestra de español, prodigarme tantas "ñ" es música sonora.
tonta: jeje, todo menos eso mi querdio. creeme: no te conviene ponerte con Sansón a las patadas.
Fea: pue'que, pue'que, ahí si no le contradigo demasiado.
impopular: popular es la mezquindad, el soborno, y sobre todo, niños mal queridos necesitados de tanta atención, que por lo menos necesitan saberse odiados o insultados.
Por ello, mi querido anónimo, procederé a darte terapia:
Tú eres muy popular... la blogósfera te estima tanto como a los mosquitos en Nayarit.
Yo te quiero. Todos te queremos. Sí te hago caso, y sí me importa lo que digas... ¿no te estoy contestando acaso?
Sí me importas, y mucho. Y quiero decirte que extrañaría tus cometarios zoeces y altisonantes, si un día decidieras ya no aparecer.
¿satisfecho? ¿Eso es lo que querías, querido y entrañable anónimo?
La otra terapia vendrá despuès. A su debido tiempo.
salud:
La esponja psiquiátrica
ahhhh!!! yo muero de ganas de saber que decian los anonimos.. O_o snif snif soy como el gato, pero no elgato con botas , el gatoque lo mato la curiosidad.
pues yo apoyo algo asi como intermedio entre lisa y martin? se puede?
Sí sí, apoyo a Janik, yo también quiero ver qué decían los anónimos. Que los abra, que los abra ¿o qué de plano eran demasiado soeces para ser publicados?
Yo iba a comentar lo mismo que Leo Ávila. En realidad Martin se preocupa por la aceptación social tanto -más o menos- que Lisa o algún otro ñoño.
Por otro lado, ¡hasta Maggie resulta más lista que Homero!
Sí, la Esponja se puso fresa. Queremos ver lo que publicó el anónimo. No sólo de pan vive el hombre, ni de libros el alma: de vez en cuando hay que darle algo de morbo y sensacionalismo, ¡chingá! :P
Besos.
Creo que el clamor popular debe conmoverla esponja, queremos saber qué decía el anónimo... Respecto a Lisa y Martin... Bueno, sobre Martin epicureísta... Los dos no pueden ser Martin! Usted sí es como Martin, deseando la alberca roja de Lisa (eso es lo que quería decir desde el principio). Su noviazgo no es con otro Martin, sino con una especie de "comic book guy" (el tipo que vende los comics, en este caso, medievalistas)
De abajo pa' riba para variar:
FRU FRU FRU: ¡jajajaja! En parte tienes razón (aunque te expones a perder a tu diseñador de cabecera), ¡jajajajaja! pero de todos modos Martin tiene algo el Señor D. y viceversa. Es que, entiende, los dos sí podemos ser Martin "sinecdóticamente". Pero bueno, el caso, mi querido, es que me gana la curiosidad y te pregunto: ¿tu eres lo que Martin tiene de epicureista? ¿o hay algún otro personaje símpsico más adecuado a tí?
ANÓNIMONOCHINGATIVO QUE TEME SER CENSURADO.- no lo censuraré, no tema. Yo sólo censuro a quien me cae gordo, y con usté no es el caso. Pídole perdón por no publicar los mensajes de Anónimo, pero ello iría contra la terapia psiquiátrica bajo la cual lo puse. Pero digámoslo así: si usted persigue en todos los blogs cometarios de un grosero que, sospechosamente escribe bien, podrá darse una idea de lo que me dijo.
PRIMER COMENTARIO DE ANÓNIMO: Tienen razón los dos, creo que idealicé demasiado a Martin (aunque me sigue cayendo bien). Por otro lado: ¡sí! salvo Barnie todos son más listos que Homero. Pero creo que muy pocos habitantes de Springfield son más FELICES que Martin... ¿qué opina?
TROMPETISTADEFALOPIO: un milagro y un placer que se aparezca por aquí. Yo tengo pesadillas con la "s" y la "z" (y creo que mi alumno ya se dió cuenta). Pero ahora sé que es "soes", jejeje!
Le digo lo mismo que al Anónimobuenaonda: no se ganaría mucho con que yo los publicara: se parecen a los quele puso a usted, sólo que a mí me acusó de ñoña, y dijo que no había podido leer ni uno sólo de mis post... cosa que logré revertir exitosamente con el de Martin.
JANIK: JE!! me gusta mucho lo del intermedio entre Martin y Lisa... ¿cómo qué sería? Debemos crear ese personaje, creo yo.
Y de nuevo, ¡oh! gato curioso (que un gato curioso con botas también podría darse): no decían nada interesante, me dijo (oígase con la voz de Labastida acusando a Fox), me dijo "ñoña", me dijo "aburrida", me dijo "impopular", me dijo "fea", y me dijo "tonta".
BUENO CHICOS, GRACIAS POR SUS COMENTOS, UN PLACER RECIBIR VISITAS... ¡Ý POS YA!
LA ESPONJA "NOHAYNADANUEVOBAJOELSOLYALODIJOPRIANIYLOCONFIRMÓHUSSERL"
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