Esta es una de las fotos de la fiesta de titulación de mi amigo Memo (vea su blog)... visítelo, porque se enuentra ahí también la cabeza de Hegel. Báste decirle al querido público lector que cuando Heidegger había dejado caer todos sus dulces (chamois, brinquitos, malvaviscos y pelones), todos, cual marabunta, nos lanzamos para destruir a Heidegger.
la esponja del ser a la mano
4 comentarios:
Jajajajajajajajajaja, qué fregonería. Mmm ¿de qué filosofoides haré mis piñatas en las posadas venideras?
No ha sido un éxito tu foto. Ya postea otra cosa...
trompe: le contacto al memo, que, ¡viera usted que catártico es agarrarse a guamazos a Heidegger, Hegel o quién la haya hecho sufrir!
FruFruFru: pos sí, ya me di cuenta.
jajajajajajaja me encanta la piñata, si!Me imagino la catarsis, pero no hay que SER.
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