Pos... aish...
Y es que encima de todo... bueno, sólo de la blusa, me eché el café dos veces.
En fin. El cuento se va a poner mejor. Lo que pasa es que, o me concentro en el Godo investigador de micos, o la tesis jamás se va a poner mejor.
Ando bajo cronómetro. Tres semanas. Tres. Un texto en alemán. Y el seminario de Ciencias Cognitivas y el de Metafísica de Aristóteles (cuya única función es impedir que se me empolve el griego... nah! no es cierto... no es sólo por eso).
Y pues tres semanas no son, porque debería darle una semana al asesor para que lea mis escritos.
Eso sí: seguiré con las misiones bicicletísticas. Y ya no voy a ver "El cartel de los Sapos"... ¡está buenísima!... Pero eso sí: me recetaré cine una vez a la semana. Hoy vi "El Cisne Negro" ¡¡¡Peliculón!!! (extrañé a la versión de carnita y huesito del Valerio... ¡el director del Ballet como que me lo recordó!)
Tres semanas, tres. Ahora sí. Sacaré ese capitulín. Van a ver.
(y me voy a poner rete-güena... también. Y que el duelo pase. No tengo prisa por tener novio-pareja-whatever. Este músculo cardiaco mío, alegoría del alma desde hace siglos, merece amar todo, pleno y sin miedos. Démosle chance a que entierre a sus muertos -bien enterrados, y si se puede boca a bajo, pa'que si despiertan, se vayan más pa'bajo-
Porque ¿saben? Tengo a mi amor platónico. Y por lo menos me daré chance de azotarme todo lo que pueda por él. Porque es hermosísimo, bellísimo, dulcísimo. Y, como bien dice el Ficino: esos amores lo hacen ver a uno a lo alto. O sea, ya saben cómo funciona el amor platónico: jamás me pelará... pero eso sí, mientras lo miro, miro pa'rriba... more Fedro... Y pondré mis ojos hasta arriba, hasta mero arriba. ¡Que me salgan plumas negras y blancas! ¡que me salgan alas!)
ejem... mejor vayan a ver el Cisne Negro...
Y es que encima de todo... bueno, sólo de la blusa, me eché el café dos veces.
En fin. El cuento se va a poner mejor. Lo que pasa es que, o me concentro en el Godo investigador de micos, o la tesis jamás se va a poner mejor.
Ando bajo cronómetro. Tres semanas. Tres. Un texto en alemán. Y el seminario de Ciencias Cognitivas y el de Metafísica de Aristóteles (cuya única función es impedir que se me empolve el griego... nah! no es cierto... no es sólo por eso).
Y pues tres semanas no son, porque debería darle una semana al asesor para que lea mis escritos.
Eso sí: seguiré con las misiones bicicletísticas. Y ya no voy a ver "El cartel de los Sapos"... ¡está buenísima!... Pero eso sí: me recetaré cine una vez a la semana. Hoy vi "El Cisne Negro" ¡¡¡Peliculón!!! (extrañé a la versión de carnita y huesito del Valerio... ¡el director del Ballet como que me lo recordó!)
Tres semanas, tres. Ahora sí. Sacaré ese capitulín. Van a ver.
(y me voy a poner rete-güena... también. Y que el duelo pase. No tengo prisa por tener novio-pareja-whatever. Este músculo cardiaco mío, alegoría del alma desde hace siglos, merece amar todo, pleno y sin miedos. Démosle chance a que entierre a sus muertos -bien enterrados, y si se puede boca a bajo, pa'que si despiertan, se vayan más pa'bajo-
Porque ¿saben? Tengo a mi amor platónico. Y por lo menos me daré chance de azotarme todo lo que pueda por él. Porque es hermosísimo, bellísimo, dulcísimo. Y, como bien dice el Ficino: esos amores lo hacen ver a uno a lo alto. O sea, ya saben cómo funciona el amor platónico: jamás me pelará... pero eso sí, mientras lo miro, miro pa'rriba... more Fedro... Y pondré mis ojos hasta arriba, hasta mero arriba. ¡Que me salgan plumas negras y blancas! ¡que me salgan alas!)
ejem... mejor vayan a ver el Cisne Negro...
Anuncios Parroquiales:
A Natalia Cervantes, abrazo :)
Esponjita
A Natalia Cervantes, abrazo :)
Esponjita
PD: por cierto, Shakira siempre es cita citable:
En fin... aquí la esponja que se muere de ganas por conocer Bogotá... algún día, algún día...
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