07 febrero 2013

Cuando era niña siempre tenía mis plumones sin tapa, y siempre se me secaban. Por eso, cuando por fin podíamos usar plumones (lo que era un evento extraño, porque el papel es demasiado delgado y los plumones arruinaban el otro lado de la página y la que seguía), yo nunca podía usarlos. Y un día vi en un documental que esa es una de las muchas cosas que les pasan a los niños con TDA. Eso y perder las tijeras y nunca apuntar la tarea al final de la clase.


Hoy, al igual que cuando era niña, no sé cómo se le hace para tener organizada la vida, en general. Y se me pierden las tapas de los plumones, y luego cuando llega la oportunidad, ya no puedo usarlos. 

2 comentarios:

luciana Rubio dijo...

No es la gran cosa, además, tú no te das cuenta, pero cada vez eres más organizada. Un beso.

quique ruiz dijo...

¿Y el metilfedinato?