18 octubre 2008

El Objeto de Spelke

Durante un duro par de semanas tomé un curso intensivo sobre "Identidad y Objeto". El primer curso fue lindo, pero eran puros loci classici sobre las broncas que tienen los analíticos con los mundos posibles, etc, etc.
El segundo curso fue supremo y soberbio: el Objeto de Spelke. No se las haré larga:
Elizabeth Spelke es una investigadora de la percepción. Llegó a la conclusión de que los seres humanos basamos nuestra representación del mundo en "objetos" que cumplen estas cuatro propiedades:
Cohesión
Limitación
Contacto
Continuidad espacio-temporal
Si aparece alguna violaciòn a cualquiera de estas tres leyes, nuestro cerebro sufre, se sorprende, o tiene un ataque de risa.
Lo más curioso de esta serie de descubrimientos es que, a nivel perceptivo, las propiedades de los objetos se "añaden" a ellos, pero se pueden "despegar". Y eso nos ocurre diario...
¡Cómo! dirán ustedes...
Uno de los artículos dice: "¿qué nos posibilita decir 'es un pájaro, no, es un avión, no, es Super man'?"
Pues que la capacidad de perseguir (tracking) un objeto es una facultad epistémica anterior (y más veloz)a la capacidad de reconocerlo, es decir, de reconocer sus propiedades, tales como figura, color, etc.
Pronto les iré poniendo algunos experimentos que los sorprenderan. Pero lo más interesante de todo es pensar que todos los tructos de magia y de prestidigitación están basados justamente en que, cuando perseguimos un objeto, le perdemos la pista a sus propiedades, al grado que si nos cambian una cosa por otra no nos percatamos, pues sólo vemos la "cosidad".
Como comprenderán, estas conclusiones tienen un fuerte peso para aquellos que andan metidos en el asunto de cuántas y cuáles descripciones de un objeto le son sustanciales y cuales accidentales.

Sí, ya alguno habrá pensado lo aristotélico que está este asunto. De hecho, ellos mismos ya se dieron cuenta también. Por eso no es de extrañar que la escuela de historiadores de vertiente analítica sea tan interesante.

Ah, sí... y yo puse en un trabajo de esa materia un famosísimo texto de Avicena en dónde distingue entre la facultad que tiene la oveja de reconocer al lobo: ve la figura, pero el miedo le viene de otra facultad epistémica. Eso le gustó mucho a mi maestro. Y a mí me gustó que, al final de cuentas, los medievales no resultaron tan oscuros (ni tan 'opacos' como Quine, pero ese fue un chiste local)

La esponja de contextual (o sea: hermenéutica todavía)

3 comentarios:

Daniel G.G. dijo...

"Si ergo has qualitates et quantitates etiam formas figurasve volemus ratione animi separare, tum demum deliberare quid sit illud, quod haec omnia inseparabiliter, adhaerens complexumque contineat; inveniemus nihil aliud esse, quam id quod querimus: silvam."

Chalc. in Tim. 301.

Daniel G.G. dijo...

Por cierto: increíble el cortito y muy al caso con el tema ¿cómo lo localizaste?

Itzel dijo...

Gracias por poner el corto para los que sólo entendemos con manzanas. Ante sus post filosóficos sólo me queda preguntar y aprender. ¿Cuál es la facultad que, según Avicena, permite asociar la forma del lobo con el miedo a sus ataques? Por lo demás, me quito el sombrero ante su exposición.