Actualización: ok, no me gastaré la entrada 900 para comunicarles esta simpleza. En la barra lateral del blog hay un pequeño link al Tumblr de utitadixerim. Es un lugar todavía muy aburrido, pero por ahora procrastino por allá (en lo que se me ocurre qué hacer con este blog, si sí lo dedicamos definitivamente a las medievalidades, o le hacemos cirugía plástica, o qué).
En fin. Ya. De todos modos hoy no estoy inspirada. Pero estoy muy divertidamente leyendo sobre el alma palmífica de las palmas y el alma uvífica de las uvas.
Los quiere:
La esponja Gundissálvica
(y no, siguen sin aparecer los espejos... ¡entiendan! ¡esa es una aberración de Averroes!)
(lo demostraré, lo demostraré, aunque sea lo último que haga, ¡lo último que haga! <- Gárgamel)
Queridos lectores:
Esta esponjita se tiene que poner a acabar su tesis. Les cuento un poquito el asunto.
Pues ella comenzó este proyecto con las ovejitas de Avicena que le tenían miedo a los lobos. Pero un día, quién sabe cómo, se metieron en medio unos espejos averroístas. Y, por un juego de la Fortuna (muy extraño), a esponja le cayó el veinte de la estrecha relación entre los espejitos y las dimensiones indeterminatae...
Antes de aquello, a esponjita le había caído otro veinte: la teoría de los sentidos interiores de Alberto mucho tenía de la teoría de la proposición del Perihermenéias. Y gracias a las habilidosas habilidades asesorísticas del asesor, esponja leyó a holandés errante... cof, cof, digo, no, al holandés Nuchelmas. Y pues sí: la 'intuición' esponjosa, sabiamente alimentada por el asesor, fructificó.
Luego esponjita se deprimió.
Luego se desdeprimió.
Luego se volvió a deprimir.
Luego se volvió a desdeprimir.
Y luego ya era Noviembre y esponjita nada que se había puesto a trabajar al aberrante Averroes y sus espejitos mágicos. Y, siendo ya Novimbre, ¿esponjita podrá terminar su proyecto tal y cómo se lo había imaginado?
imaginatio
imaginatio
imaginatio
Esponjita va contra el tiempo; la paciencia del asesor cuya representación es una vela de la cuál sólo queda un mínimo pabilo; la carencia total de recursos económicos que la orilla a inventarse un curso de Lógica Medieval y vendérselo al Colegio de Letras Clásicas (¡que casi se lo han comprado!), una mudanza inminente, un mes de renta debido y lo que va de Noviembre, los cursos de La Salle, una salud que, esponja comienza a sospechar, está un poco dañada –y requiere unos exámenes sanguíneos que el IMSS le sacará amorosamente– y... la tesis.
Así que, de nuevo, me retiro unos días. Cuando vuelva, este blog se transformará totalmente en Blog Medievalista. Y si quieren seguir leyendo mis cuitas y cuentos, los remito a mi Tumblr que se encuentra en la parte inferior de la ahora muy organizada barra de este blog.
¡¡¡¡los quiero fieles lectores!!!!!
Esponja
(Que adora, idolatra, estima, ama y quiere a su Demiurgo)
Acá, mi óbolo a mi única divinidad...
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