Tán ta ta tán... esta es la antepenúltima letra... y yo no acabé el capítulo. Ya mero... pero es que me engolosiné con el Syllogismus Brutorum, un articulito que está en alemán, y que agarré vuelo para leer porque el martes Ely se ofreció a ayudarme... ¡y resultó un artículo muuuuy bonito! Quiten ustedes el detallito de que se trata del meollo de mi tesis. Tiene una introducción histórica donde habla de cómo Sexto Empírico, analizando la prodigiosa memoria de Argos, el perro de Odiseo –más listo que sus siervos– lo reconoció inmediatamente; y el ejemplo de Crisipo del perro que, persiguiendo un rastro y al llegar a una encrucijada de tres caminos, huele uno, huele otro, ninguno de esos dos tiene el rastro, y sin oler persigue el tercero. Conclusión: algún tipo de silogística deben tener los perros. La cosa, además de lo interesante y bonito, es que en ese párrafo me atoré, y fue por puras deducciones crisipianas que Paco y yo (que no sabe alemán pero sí mucho griego y latín) pudimos traducirlo.
El texto en alemán dice así:
Gezeigt hatte es Chrysippos: Gelangte ein Hund an eine Weggabelung, genügte es ihm, an zwei Wegmündungen nach der Fährte zu suchen.
Y el problema fue con las palabrotas con W: Weggabelung y Wegmündungen. Nomás no aparecía la primera en el diccionario. Y de pronto, Google Translator puso "tenedor". Entonces esponjita con cara de Was? le contó a Paco lo ridículo que se oía el párrafo. Seguí buscando y apareció por fin la palabra buscada: encrucijada. Pero lo que seguía no tenía sentido porque según el translator, Wegmündungen es "gire hacia la izquierda cerca de". Y el crisipiano Paco –luego de contarle la anécdota perruna, que yo ya me sabía– me dijo: ¡mensa! dice Tenedor: ¡es una encrucijada de "tres" caminos, un camino-tenedor. El perro huele dos "palitos del tenedor" y elige el tercero... entonces al fin busqué la segunda palabrota y, literalmente, resultó "des-em-bocadura": Weg (camino) + Münd (boca) + ung + el final de dativo plural. Pues sí: el "tres" estaba oculto en el tenedor. Y el párrafo dice así más o menos:
"Crisipo lo ha probado: llegó un perro a una encrucijada de tres caminos, y le fue suficiente dos de las desembocaduras para encontrar el rastro".
Pues sí. Cuando uno a penas anda tanteando una lengua, así procede: perruna y bestialmente, mediante inferencias. (¡Ja!) Poco a poco, con todo, voy aprendiendo a leer mejor –y tener amigos linguófilos, ayuda mucho.
Me voy, tengo que acabar ya con el médico persa y pasar a lo que sigue. Nomás les voy a dejar un super video. El señor que presenta ahí al grupo, guitarra rítmica y voz del grupo, además de jazzista es ¡el mayor especialista de Heráclito en México! Enrique Hülsz. ¡Obviamente yo lo conocía por su faceta heraclitiana, no por la jazzística! ¡Ja! ¡Pero qué cosa más maravillosa! Para que vean que quienes hacemos historia de la filosofía somos gente rete-interesante (¡Obvio! ¡hacemos cosas rete-interesantes!).
Les dejo el link a su página de myspace, donde encontrarán mucha de su música:
Les dejo el link a su página de myspace, donde encontrarán mucha de su música:
¡y un videíto para que se den un quemón!:
Y yo, al son de la heraclitiana voz de Enrique Hülsz, me pongo a escribir sobre Avicena. Que tengan un bonito jueves:
esponjis
PD: ¡Al fin arreglé mi bicicleta! No la chiquitika de aluminio, sino la Benotto roja que carecía de un pedal... Tres años duró esperando a que abrieran el puesto de bicicletas a dos cuadras de mi casa... ¡ok! es la última vez que espero a que la montaña venga a Mahoma.
Y fue la tarde y fue la mañana, gutural día reish.
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