26 mayo 2007

Némesis



Después de una noche de jerga, mi amiga Pato y yo decidimos ir a desayunar al Sangrons unos chilaquiles "suizos". Antes de empezar a deglutirlos, con infinito placer a causa del hambre y la borrachera, Pato se dió cuenta de que había perdido el celular... el mismo que la acompañó durante años, en el cual recibió noticias tristes y felices, donde traía los teléfonos de amigos viejos y muy queridos. Pero lo perdió, lo que es común con los teléfonos celulares.



El famoso rey de Iliria, Creso, festejaba ser el hombre más feliz del mundo. Ocurrió que Darío II, el persa, decidió conquistar la Iliria. Fue al oráculo de Delfos a para pedir consejo. El oráculo dijo "ganará un gran imperio". Creo no reparó en que Iliria no era un gran imperio y tán tán, adiós el feliz Creso en una celda de Darío.


Supuestamente la enseñanza de la triste historia de Creso, es que cuando uno se siente en la cumbre de la felicidad, llega Némesis y le arruina a uno el jueguito. Pato se lamentaba amargamente: "yo ya lo sabía: siempre que parece que me voy a divertir, que voy a ser absolutamente feliz, zaz, pasa algo, y me recuerda lo infeliz que debo ser".
Némesis es la moneda de tres pesos, Némesis es el elefante que entra a danzar a la sección de cristalería, Némesis es la ráfaga de aire que echa abajo el castillo de Naipes. Némesis no deja que se acerque el que anduvo tan lejos.



Némesis fue perseguida por Zeus... la diosa se transformó en miles de cosas para evitar el embate inmoral de Zeus, hasta que descidió hacerse gansa... Zeus se trasnformó en algún otro pájaro (cisne), y total que le hizo un huevo: de él nació Helena, la que tan mala fortuna llevó a los valientes argivos y a los aqueos.


Némesis, hija de Nix y de Océano, es la diosa de la Justicia y la Venganza. Es el equilibrio que evita el excéso de felicidad en los mortales. Es la que alienta en el espíritu humano un esceptisismo contra la felicidad: "pero si ya lo sabía... ¿cómo podría ser yo tan feliz?"

Dice Lisa Simpson: todos necesitamos un Némesis (y aparece el bebé de la ceja junta "némesis" de Maggi). Némesis es el supuesto nombre de una esterlla hermana del Sol que cada 200 millones de años desestabiliza la nube de Oort y provoca que se extingan los dinosaurios. Némesis es una especie de equilibrio cósmico que mantiene al bien de su lado y al mal de su lado.

Némesis es la imagen que aparece en el segundo oráculo en la Historia Interminable: Atreyu ve a Bastian, el Valiente al cobarde, el bondadoso al mezquino.





Y usted ¿qué ve, mi querido lector?





(Yo a Pato le dije que no era para tanto: si uno se pone estoico, en verdad, en verdad os digo, que Némesis revienta su espejo y no logra minar la infinita felicidad del Rey Creso. Divina es, en verdad, la felicidad que los dioses le dieron al hombre al volverlo dueño y señor de su felicidad)





la némesis de la esponja

8 comentarios:

Señor Chiquito dijo...

Primero que nada: ¡Que buen post!
Hasta me dan ganas de copiarlo y guardarlo. Pero bueno, ¿si te dijera que hay un punto, un lugar, en el cual cualquier Némesis se invalida? O sea que en dicho punto nada te agarra en curva. Por supuesto que eso no invalida la sopresa, pero al menos no te matan las consecuencias.
Pero pos, en otro plano, me ha lidiar con cada Némesis...
P.D. Quiero un gato como el que tiene en la esquina de su blog, ¿cómo le hago?

Esponjita dijo...

El gato, además de lindo es un hipervínculo que si le pincha, lo lleva a la página de los gatos. Hay de todos colores y sabores, y ahí vienen las instrucciones para instalarlo. Por cierto, la idea se la piratié a Janik, quien, como corresponde, tiene un gatito violeta.

Salú señor chiquito:
La esponjitta...
PD: gracias por las flores a mi bló. Yo estoy de acuerdo con usté: hay ciertamente un lugar en donde somos invulnerables a la Némesis: los estoicos lo descubrieron, creo yo.

Señor Chiquito dijo...

Seguiré al gato.
Bueno, yo me refería a los budistas Zen, je.

Señor Chiquito dijo...

Seguiré al gato.
Bueno, yo me refería a los budistas Zen, je.

Darío Zetune dijo...

Who´s "el señor borroso"???

Anónimo dijo...

conteste los bonitos comentos, o vayase a dormir!

Itzel dijo...

A mí me sucede igual que a su amiga Pato; siempre que la felicidad se digna a favorecerme volteo a buscar a Némesis por todos lados, pues sé que las desdichas también deben tener su parte. Lo interesante, sin embargo, es recordar que podemos conquistar una especie de felicidad invulnerable, incluso frente a los embates de Némesis.
Gran reflexión la suya, a partir de un celular perdido.

Esponjita dijo...

SEÑOR CHIQUITO: Pues no creo que halla grave diferencia entre el budismo y el estoicismo, nomás que uno está en chino y sánscrito y el otro en griego y latín... y gracias por la flor.
SERCH: lo del señor borroso lo explicaré en otro post... jeje, a ver que tal sale. Yo sí creo que los hombres tienen derecho a su día internacional del hombre
MÉMESIS: ya vooooy, ya vooooy
ITZEL: Gracias por la flor. Admito ciertamente que es difícil dejar de ver a Némesis en todos lados... pero cuando uno le dice a un amigo muy querido (como me pasó hoy justamente) "si no te vuelvo a ver, pues ya ni modo", el espíritu se libera y vuela lejos... ¿qué más da que mañana explote el mundo (pensé hoy), si hoy ya fuí feliz?...
A propósito de su Post: ¡¡¡viva el cigarro!!! ¡¡¡jamás de nuevo un mundo sin tabaco!!! ¡¡hasta la memoria siempre, camarada sir Raleigh!!!