25 agosto 2010

Te quiero Ray Bradbury

Y me dice un chavo:
¿me puede explicar eso de la Substancia, el Accidente y la Esencia?
Me lo dice saliendo de clase... tengo encima otros tres que necesitan darme su tarea, correo, preguntar por la calificación...
Despacho los asuntos urgentes y burocráticos y al fin le digo al chico:
Dime pues, ¿qué querías saber?
No... ya nada... mejor luego... bueno, mejor dígame ¿dónde se consigue ese libro de ciencia ficción?
¿cuál?
Ése que estamos leyendo, el ente y la esencia
Y por qué me dices que de ciencia ficción... si me vas a echar invectivas, mejor dímelo claramente.
No, no... es que esos conceptos de ente, esencia y substancia se usa mucho en la ciencia ficción...

...

A ver... ¿leíste? ¿hiciste la tarea?
No.
¿Por qué?
Porque no lo creo necesario
(¡!)
¿Ni siquiera para tener derecho a examen?
No sé si voy a presentar la materia...
(¡¡!!)
¿Entonces qué haces aquí? ¿tu primera opción era Filosofía?
No... era diseño gráfico.
¡Entonces qué haces aquí! ¡¿Por qué no estás estudiando para presentar el examen a la UAM Xochimilco?!
Es que sí me interesó al principio, pero luego me di cuenta de que esto no me sirve para nada... que no lo puedo aplicar a la realidad...
¡¡Pues ve y presenta el examen de admisión a Diseño a la UAM Xochimilco!! ¿A qué vienes entonces? no entiendo...
Es que estoy estudiando idiomas
(¿?)
Mira: yo te explico lo que quieras, pero es requisito que leas y hagas la tarea... no puedes hacerme perder el tiempo a mi y a tus compañeros...
Sí... ya me voy...

***
Recibo un correo: me pregunta si la materia non-signata es un ente de razón o no... que cuál es su estatus ontológico. Llevo algunas horas traduciendo el De principiis naturae... afortunadamente el hermano Sylverio tenía dudas semejantes. Le contesto que la clase próxima hablaremos hasta la saciedad de todos los tipos de materia... (y aquí entre nos yo estoy tratando de contestar la pregunta...) (y aquí entre nos... ya me atoré de nuevo con el latín)

***
Estoy buscando maestro de alemán. Los precios varían, las calidades... y la relación calidad-precio. Hay un nombre que parece impronunciable: Jörg. Ely no puede pronunciarlo. El maestro de alemán #1 puede, pero yo tengo que ir a su casa a Atizapán si quiero que me dé clases. Mi maestra #2 me dice que la ä se pronuncia como 'e'... y no puede pronunciar Jörg. Mañana veré al maestro #3... cobra menos que #2, ofrece las clases en CU... pero aún falta saber si puede o no pronunciar al innombrable. (¡Lástima que pronunciar Tlacoquemécatl no sirva para nada...! porque a mí me sale muy bien)

****
Mi primer maestra de alemán nos explicó: la ä se pronuncia como cuando hacemos en español sonido como de asquito: äää! La ö como cuando hacemos sonido de ¡ay la baba! ¡ööö!... la ü es fácil: como i con boca de u. Pero ya no pude seguir con ella: el horario de metafísica con Horneffer se empalmaba. Tuve que cambiarme de horario con la maestra que nos hacía aprendernos larguísimas listas de palabras y sólo hablaba de sus viajes a Alemania... deserté. No por la maestra, sino porque de pronto la filosofía me pareció inútil y deserté de todo...

Porque me parecía todo ciencia ficción...

y porque obtuve mi primera NA con Priani: con un trabajo sobre el Ente y la Esencia...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya paciencia con ese chavo, y la i se pronuncia como u (¿?)

Esponjita dijo...

No, la ü alemana (u umlaut) se pronuncia como la 'u' francesa: haces boca de 'u' pero dices 'i'.... (y estrictamente eso es lo que pasa con las otras dos: la ö es una e que se pronuncia con boca de 'o' y creo que en la 'ä' pones boca de 'a' y dices 'e'... bueno... más o menos...)

Esponjita dijo...

No, la ü alemana (u umlaut) se pronuncia como la 'u' francesa: haces boca de 'u' pero dices 'i'.... (y estrictamente eso es lo que pasa con las otras dos: la ö es una e que se pronuncia con boca de 'o' y creo que en la 'ä' pones boca de 'a' y dices 'e'... bueno... más o menos...)

Anónimo dijo...

Pues si llega a D.G. bien por el, pero si no puede definir el concepto que trate de dar a entender...

Con eso que creen que un D.G. solo hace dibujitos a lo tarengo.

Aunque por otro lado lo jocoso del asunto es que fuera daltonico.

Saludines

Esponjita dijo...

Anónimo: lo de daltónico, jajajajajaja. En todo caso, hay algunos con daltonismo conceptual...(no se crea, uno de mis mejores alumnos -tramposón él, pero bastante listo- también iba para D.G. Si nada tiene que ver el querer ser D.G. o no... el problema está en otro lado definitivamente)

Anónimo dijo...

Querida esponjita:

Disculpe usted mi ignorancia, pero me llenan de curiosidad sus motivos por los cuales usted quiere estudiar alemán.
Una alemana, la cual aprecio mucho, me dijo un día. ¿Por qué quieres aprender alemán? si sólo se habla en Alemania, Austria, Liechtenstein y Suiza; yo estudiaría algo más útil como... francés o chino mandarín.

Maya (Una nueva lectora de su blog).

Esponjita dijo...

Hola Maya,

Pues por extrañas razones del destino (que algo han de tener que ver con Carlo Magno y su invención de las minúsculas), de pronto la lengua franca de la filosofía se volvió el Alemán.
Toda corriente filosófica actual, sean los continentales (con Heidegger y Husserl a la cabeza) sean los analíticos (con Frege, Carnap y Wittgenstein) tienen su fundamento en textos alemanes.

Peor aún: la filología parece ser una disciplina cultivada en alemán mucho mejor que en cualquier otra lengua.

Mire usted mi problemón: hago historia de la filosofía medieval. Y pretendo hacer mi tesis sobre un alemán: Alberto Magno, obispo de Colonia.
A los alemanes les interesa mucho Alberto por ser alemán. Pero Alberto es interesantísimo por sí mismo. Así que el 80% de lo que hay sobre Beto está en Alemán.

o sea: hago filosofía, hago un tipo de filosofía que requiere filología y estudio a un alemán...

Y el mero mero de los estudiosos de Alberto es un alemán del cual quiero ser alumna.

Por eso úrgeme aprender Alemán.
(Porque si bien quizás fue una exageración de Heidegger decir que sólo en griego y en alemán se puede hacer metafísica, lo que sí es verdad es que el alemán es casi tan hermoso como el griego... y el griego es muy hermoso...)


Schwamm...