23 marzo 2013

En estos días...

Voy a seguir sin escribir por un rato. Juro que no es exceso de trabajo ¡¿eso cuándo ha sido pretexto?!, es, más bien, algo así como que mi esponjoso cerebro está totalmente exprimido. Pero, no sé ¿les traigo videos bonitos? A ver qué se me ocurre para mantener vivo este espacio. 
Pero bueno, sí les contaré un poco qué ha pasado estos días.

Resulta que hace unas semanas R.T. convocó a un workshop (taller llámesele en castellano) on-line (en inglés me ahorro muchas explicaciones porque pues ya es un tecnicismo) que forma parte del proyecto "Aquinas and the Arabs". Y L.X. me invitó a participar. Se me ocurrió presentar el capítulo de Avicena que ya había sido chuleado por el Asesor (o sea, que dijo que era un buen capítulo). Y la primer estrujante historia fue cómo conseguí traducirlo al inglés. Tomé unas decisiones muy estúpidas al principio, pero luego me encontré al maravilloso E.Ch. quién lo hizo en dos patadas... y gracias a la divinísima fortuna hasta mis papás se emocionaron con el asunto y recibí beca parental para solventar el asunto. Total que ya con capítulo traducido, mandé el texto que fue aceptado.  Todos los participantes teníamos que leer los papers de todos, de donde aprendí horrores (y ya dejé de hacerle fuchis a la metafísica), aunque ya me quedó claro que llamarme a mi misma medievalista es una exageración: de lejos tengo el dominio que ellos tiene de Tomás. Y luego fue el workshop y estuvo muy bien, a pesar de que participé poquito dado mi magro inglés. Me hicieron muy buenos señalamientos y entendí lo utilísimo que es trabajar con gente que se dedica a lo mismo que uno. Lo cual me hizo recordar que a F.O'R. le debo una lectura, y que nosotros deberíamos hacer nuestra versión en castellano de esos proyectos. Y, por último, quedó el proyecto de hacer un seminario de tesistas en nuestro tema (o sea, Tommy, Alberto y los árabes), vía on-line (¡Dios te salve, Google +!) y... a ver qué pasa. Porque la conclusión de esto aún no llega: el 1º de abril es el dead line para el concurso de la NoSeQuéSiglasVanAquí y me animaron a entrar... nótese que seguiré ausente de acá un rato.

Esa fue la historia de estas semanas. Eso, y seguir avanzando con capítulo de Alberto en la tesis. Voy a la mitad, más o menos. Ya le mandé lo que llevo al Asesor y nos veremos prontamente ¿Resultará que mi capítulo está muy loco? ¿me mandará a encerrar al Arkham Asylum? Ya veremos, pues, que pasa con mi proyecto. Porque de las mejores cosas del Workshop fue haber conocido a Katjia. Y ella me contaba como los tomistas desprecian mucho la influencia árabe en Tommy. Y entonces me reí y le conté cómo mi capítulo, mi loco capítulo, trataba de probar que, a pesar de lo árabe que se ve el De homine en la sección que estoy trabajando, se me ocurrió tratar de probar la influencia de Abelardo. Y a ver qué pasa, digo yo. 

Bueno, queridos lectores, me voy. Dormí todo lo que quedaba del viernes, su noche, y la madrugada del sábado. Desperté, evidentemente muy temprano. A mi al rededor veo los estragos que ha causado en mi casa estas semanas de trabajo (entreveradas con la prepa... duras semanas), y tengo que ponerme a hacer quehacer. Mucho quehacer... lavar... trapear... encontrar una fuga de agua que misteriosamente sale por debajo de boiler... y jugar con mis gatitos. 

Los quiere mucho:

Esponjita Escolástica. 

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